El Secretario General del PSOE y Presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó hoy que, ante la crisis económica, “no vamos a esperar a que llegue la recuperación”, sino que “hay que traerla” y advirtió que “de la crisis se sale juntos, contando con todos”, con los agentes sociales, los sindicatos y los representantes de los empresarios.
Ante los 243 miembros que componen el Comité Federal del PSOE, Rodríguez Zapatero señaló que en este momento de inseguridad y debilidad de los mercados, corresponde a los poderes públicos, al Estado, “tomar las medidas necesarias de impulso y reactivación de la economía. En ese sentido, el líder socialista aseguró que “vamos a utilizar todo el margen del que disponemos” y que “nos otorgan las cuentas públicas, con plena determinación”.
Zapatero explicó que el Gobierno va a combatir la crisis y preparar la salida de la misma apoyándose en cinco convicciones o pautas de actuación y que son: dar la cara y estar permanentemente al frente; no vacilar en utilizar responsablemente el impulso público de la reactivación con todos los márgenes de los que disponemos; garantizar la protección y cohesión social; contar con sindicatos y empresarios, y acuerdos con todas las fuerzas políticas; y participar activamente en la gestación de una respuesta internacional coordinada.
En los meses inmediatos, el presidente Zapatero afirmó que el objetivo fundamental de la tarea del Gobierno será combatir la evolución negativa del desempleo. Se refirió así a su compromiso de presentar el próximo 27 de noviembre en el Congreso “nuevas medidas de reactivación” de la economía, “directamente vinculadas a la creación de empleo”.
Unas medidas que tendrán como objetivo central “la movilización a corto plazo de los recursos públicos para estimular el empleo. Se tratar de “acelerar infraestructuras; rehabilitación de vivienda; mejora de entornos urbanos..”. Medidas con un “impacto directo en la mejora de la productividad de todo nuestro tejido” y actuaciones “inmediatas y muy vinculadas a los entornos locales donde también se genera un gran impacto en la actividad económica”.
COMPROMISO SOCIALDEMÓCRATA
En otro momento de su intervención, Zapatero aseguró que los socialistas “hemos gobernado con fidelidad a nuestras señas de identidad cuando la situación económica era buena”; señas que “vamos a mantener en este periodo de serias dificultades económicas” y que son “la fidelidad con los trabajadores, con los más necesitados y con las políticas de cohesión social”.
El Secretario General del PSOE afirmó que su compromiso socialdemócrata “es hoy más fuerte que nunca” y que el Gobierno “no se va a dejar llevar por cantos de sirena de aquellos terrenos ideológicos, dogmáticos, que, precisamente, han originado tanto daño en el funcionamiento del sistema financiero”.
“Zapatero demostró convencido de que España remontará la situación y volveremos a una senda de prosperidad y de creación de empleo. Mientras tanto, reiteró, “nuestro objetivo principal será mantener la protección y cohesión social”, así como “el apoyo a los que más lo necesitan”
El Secretario General defendió su “empeño” personal y del Gobierno de estar en los foros internacionales como la Cumbre de Washington, tras los que “late el deseo y la confianza en nuestra capacidad de contribuir a resolver los problemas globales” y “la convicción de que nuestra suerte como país y la suerte de los valores en los que creemos se juega ahí, cada vez más”.
Para Zapatero este momento “apela al debate público y a la unidad”. Tenemos además “una gran oportunidad” que hay que “aprovecharla como país”. “Así” –dijo- “la concibo yo y así me gustaría que lo concibieran las demás fuerzas políticas, de manera singular, el principal partido de la oposición”.
Zapatero se refirió también a Europa como el instrumento indispensable para abordar la crisis. A su juicio la Unión “está reaccionando bien”. Recordó que Europa “se está revelando esencial” tanto para resolver los problemas globales como para resolver los problemas nacionales de todos sus miembros”.
De cara a la presidencia española de la Unión Europea en 2010, Zapatero adelantó que su ambición para ese periodo es “dar un impulso europeísta, en la mejor tradición de los proyectos socialistas”, así como “dar un impulso también a la relación trasantlántica”; algo para lo que espera contar con “la mejor disposición de la nueva administración norteamericana y del Presidente Obama”.
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